«Siempre hay cosas peores»
Por Daniel Prado Aranda – 5º P
Siempre se quejaba de su mala suerte…
… y no era de extrañar, pues su mala suerte llegaba a niveles extremos. Cuando tenía prisa, los semáforos se ponían siempre en rojo; cuando quería comprar algo, se agotaba…
Claro que esto pasaba en ocasiones remotas, pero para el joven José Juan, era como si pasara siempre.
Un día, paseaba distraído por el Parque del Retiro, cuando vio un puesto callejero. Comprobó que el puesto era de UNICEF.
Se acercó, y los señores, amablemente, le enseñaron unas cuantas fotos. José Juan registró las imágenes y comprobó, con horror, que los niños de África vivían bastante peor que él.
Desde ese momento, nunca más se quejó de su mala suerte.
La imagen, muy curiosa. Nunca había visto a alguien con la cara así pintada.